20090613

SIEMPRE EN UN LUGAR PRECISO



Sigo encontrando entre las calles, de cuantas ciudades vivo, un lugar preciso, donde parar y recordarte. Es una fijación mía o una bendita maldición que me tiene atrapado sin remedio. Eres tu quien me trae siempre la llave del recuerdo.

De las luces de la Poblachuela, en las tardes jóvenes y calientes del verano, tostadas en una dorada luz que se refresca en las umbrías de los álamos. Del canto de los grillos al atardecer, cuando la paja se humedece en las borduras de las huertas y Venus tilila en el horizonte, con un silencio clamor que ilumina el declinar del sol agotado.
Eres tu también, la que me dice al oído cuanto tiempo va pasando sin remediar las ausencias, y celebrando nuestros encuentros. Incluso te ví en el norte, sorteando las malas horas que suelen venir con la soledad endurecida por la lejanía.
Y tú me traes la luz simple y brillante de aquella luciérnaga que se escondía entre la albahaca, en la noche silenciada de Tresenzinas.
Bajo la constelación del Cisne te acercaste a mi para compartir su radiación. Pero tú, que nunca reprochas nada, que sonríes siempre cuando acudo a mirarte, vuelves a mí en el último rincón en el que me encuentro.
A veces, con tus ojos negros de profundo y hermoso suspiro; o verdes oscurecidos, por cómo me miras asombrado por mis cosas, desde que eras chico; o azules, en todas las coincidencias que tengo contigo desde chica; o marrones verdosos que aguardan, entre tus manos pequeñas, las que cojo sin cansarme desde que eras niño.
Sigo encontrando por las calles, allá donde me encuentre, un lugar concreto donde parar y recordaros. Sois, yo mismo, que me encuentro en vosotros recogido. Jugando a que vivo independiente, cuando vivo pendiente de vosotros todo el día.Q.Ko.

2 comentarios:

Dolores_Danaher dijo...

Creo que es más dificil cuidar a aquellos que te quieren que cuidar a aquellos que quieres, que no siempre coinciden, aunque a veces sí. Pero también me parece más importante. Con cuidar me refiero a intentar, en la medida que nos sea posible, hacerles la vida un poco más feliz e impedir que otros les dañen.

Me crié en una familia en la que siempre nos cuidamos unos a otros. Y en la que siempre nos quisimos. Tal vez por eso, ahora la vida me sonría cuando comienzo a formar una nueva.
Gracias por Nunca Jamás, más allá de la Fuencaliente :)

Lapali dijo...

Este párrafo me hace estremecer: "Sigo encontrando por las calles, allá donde me encuentre, un lugar concreto donde parar y recordaros. Sois, yo mismo, que me encuentro en vosotros recogido. Jugando a que vivo independiente, cuando vivo pendiente de vosotros todo el día"
Cuanto más lo leo, más me guata.